«La gente está resignada, esperando otro golpe de suerte», señaló el Economista Ernesto Talvi, presente en Treinta y Tres
Talvi se refirió a las posibilidades alcanzables respecto a mejores perspectivas aunque señalo que la gente en el interior esta desencantada, en rueda de prensa y posterior debate en charla en el Centro Comercial e Industrial.
Dijo que: » estamos esperando un golpe de suerte y que se recuperen los mercados en Brasil y en Argentina y sobre todo luego de la bonanza y el apetito voraz con que se despertó el gigante chino. Pero no hemos hecho nada para tener nuestro ahorro en momentos de bonanza»
El gobierno podrá poner más impuestos pero no habrá quien los pague señalo reconocido economista. Además recordó que «hicimos propuestas al Estado para lograr ahorrar unos mil millones de dólares, pero no se hizo. Sólo evitando llenar las vacantes al sistema público que este gobierno realizó, a pesar de las advertencias».
La «parálisis» y «dejadez» del Estado para enfrentar problemas claves en la vida cotidiana llevaron al «descreimiento» de los uruguayos respecto a los partidos políticos como portadores de soluciones, según el economista Ernesto Talvi.
El director académico de Ceres aseguró que Uruguay tiene un proyecto de país con una matriz clara. Desde que asumió el Frente Amplio, explicó el economista, se señaló que «el crecimiento no puede admitirse sin la inversión privada». Por otra parte, se apuntó a la redistribución por la vía de una reforma, y a la atención de la emergencia social en los contextos vulnerables a través de la creación del Ministerio de Desarrollo Social. Sí bien hay otras cosas, esa es la gran matriz. Se buscó «atacar al núcleo duro de la fragmentación y la marginalidad a través del desarrollo social». En esto, opinó Talvi, «hemos fracasado» y «debemos replantearnos como país qué es lo que vamos a hacer para reconstruir el tejido social».
Somos un país «institucional y serio» afirmó Talvi. El Frente Amplio se opuso a varios proyectos mientras era oposición, pero ahora «construye sobre ello» como es el caso de las plantas de celulosa. A su vez, opinó que sería sano para una «alternancia republicana y democrática» la creación de una «coalición alternativa de oposición alrededor de los dos grandes partidos fundacionales». A través de los partidos tradicionales hemos avanzado y construido en muchos aspectos, pero «hemos tenido parálisis en temas claves: en educación en contextos vulnerables, y en cómo vamos a readecuar nuestro sistema para preparar a los jóvenes para la economía en el siglo XXI».