Atrapan al creador del juego de la ballena azul

Sólo 21 años tiene Philipp Budeikin, el joven detenido y acusado de ser el creador del juego de la Ballena Azul, los 50 retos que han cobrado la vida de más de 150 adolescentes alrededor del mundo.

Una publicación del sitio web Saint-Petersburg buscó conversar en noviembre de 2016 con el hombre, que no solo confesó que él estuvo detrás de varias de las muertes, monitoreadas a través de VK, el Facebook ruso, sino que cuenta detalles de su vida cotidiana. «Sí, realmente lo hice. Murieron felices. Les di lo que no tienen en la vida real: calidez, comprensión y comunicación», dijo.

Budeykin vivía en la ciudad de Solnechnogorsk, cerca de Moscú, cursó tres años de Psicología y fue expulsado de la universidad, refugiándose después en la ingeniería de sonido y música.

Son justamente sus conocimientos los que lo llevan a manipular vidas. «Si se viola el régimen (de sueño, de acostarse a las 21 y levantarse a las 8), la mente se vuelve más accesible a la acción», declara de entrada, confesando lo que piensa de quienes han seguido su juego y separando a la gente entre personas y residuos. «Ellos (los del segundo grupo) son los que no tienen ningún valor para la sociedad y solo le harán daño a ella. Estaba limpiando la sociedad de tales personas”, argumentó.

Una de las pruebas es la que da nombre al juego: grabarse en la piel con un cuchillo una ballena. La meta del reto es llegar al nivel 50, grado en el que el participante deberá suicidarse.

Existe un administrador del grupo responsable de dar las órdenes a los adolescentes y tras cada prueba superada debe enviarse una imagen que demuestra que se ha cumplido cada paso.

Finalmente fue detenido en Rusia uno de los administradores y presunto creador de este macabro y enfermo juego, es un joven de 21 años llamado Philipp Budeikin quien manejaba todo esto en la red social VKontakte, que es el equivalente de Facebook en Rusia.

Esto luego que dos menores de 15 y 16 años se lanzaron al vacío desde un piso 14 siendo las autoridades las que apuntaron a que serían parte del grupo administrado por Budeikin, según informó el diario Nóvaya Gazeta.

El sitio web Saint-Petersburg publicó una entrevista donde Philipp reconoció su culpa. ‘Sí realmente lo hice. Murieron felices. Les di lo que no tienen en la vida real: calidez, comprensión y comunicación, dijo sin remordimiento al mismo tiempo que agregó que sus víctimas fueron 17.

Con información de cnnchile y adnradio