Delegados de los clubes pidieron un Consejo de Liga tras partido en el que la denuncia de agresiones a jueces destapó irregularidades.
“Nosotros lo único que hicimos fue dar a conocer una serie de hechos a la Justicia. Pensábamos en un delito de lesiones. Luego aparecieron otras cosas”. Las expresiones del abogado de la Asociación Uruguaya de Árbitros de Fútbol (Audaf), Fernando de los Santos, resumen lo ocurrido el fin de semana. Lo que empezó siendo una agresión a dos árbitros terminó develando que en el fútbol uruguayo hay equipos que adulteran documentación y jugadores que no son quien su ficha dice ser. “Otras cosas” equivale en este caso a usurpación de identidad y falsificación de firma.
“El lunes tuvo que ir a declarar a la Justicia un chico que desde 2013 no jugaba al fútbol. O sea que desde entonces, el carné fue usado por otras personas, ¿o usted se piensa que es un hecho aislado?”, le preguntó retóricamente a ECOS quien patrocina a los árbitros Carlos Rocca y Anahí Fernández, agredidos el sábado durante el partido entre los Sub-19 de Platense y Basáñez.
De los Santos refiere a Fernando Naso, un joven que fue citado a declarar porque ese día supuestamente había jugado con la siete en Platense. En realidad, ese sábado estaba en Camboriú.
Ese mismo día, el técnico de Platense, Carlos Valerio, afirmó que es práctica común de varios clubes que jueguen jugadores con nombre cambiado. “En otros clubes se ha hecho, yo he estado, no solo Platense. Hubo clubes que metieron jugadores mayores y la gente de Platense no reclamó. Nadie lo revela porque se intenta sacar provecho deportivo. Si querés ganar un partido, metés un jugador mayor y lo hacés con el carnet de un juvenil”, dijo a la prensa a la salida del juzgado.
El presidente del Consejo Único Juvenil de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Aldo Gioia, esas declaraciones son inaceptables. “Estas expresiones de que se trata de una práctica habitual no pueden ser compartidas de ninguna manera. Más allá de que haya intereses deportivos, estamos hablando de divisiones formativas. Acá los adultos tienen que tener un mínimo control moral”, aseguró el directivo a ECOS.
Gioia se dijo reconfortado de que delegados de los distintos clubes se hayan manifestado sorprendidos y molestos por tales afirmaciones. “Estos mismos delegados han pedido por este tema un Consejo de Liga, grave y urgente”, añadió. Este martes quedaría definida la fecha.
Sin embargo, Giogia reconoció no poder “ni asegurar ni desmentir” que esta práctica ocurra con cierta frecuencia, sobre todo en las inferiores. Los delegados de cada club muestran los carnets ante sí y ante el árbitro, contó.
“Cuesta encontrar una explicación a lo que pasó”, señaló. “Esa práctica tiene muchos vicios de desprolijidad. Cuando uno tiene mala intención de sacar una ventaja, uno lo puede hacer…”, admitió. Aún no han estudiado la eventual adopción de nuevas medidas de control. “Esto está muy fresco, no es fácil”.
“No quiero bajar el nivel”
De los Santos hace 25 años que trabaja con Audaf y no recuerda una agresión como la del sábado. Sus defendidos han quedado afectados a tal punto que les ha evitado el contacto con la prensa y le ha pedido al psicólogo del Colegio de Árbitro que los atienda. “Más allá del hecho, la conmoción y la falta de experiencia de haber ido a un juzgado penal fue todo un combo. Ayer (por el lunes) se pasaron cinco o seis horas declarando”.
De los Santos prefirió no referirse a declaraciones de allegados a Platense –como su coordinador deportivo Nelson Prieto- que cargaron las tintas en Rocca, al que acusaron de iniciar los incidentes al zamarrear a un alcanzapelotas de 14 años (versiones previas hablaban de un niño de ocho o diez años) que estaba insultando a la jueza de línea, que era Anahí Fernández, su pareja. A ella también la cuestionaron por meterse en el borbollón.
“¡Si acá nadie sabe nada, si los jugadores no eran los que jugaban, el padre no era el padre, es un combo complicado! Creo que es tratar de salvar el pellejo de alguna forma, pero está descartado que haya habido alguna agresión por parte del árbitro. Se dio manija a pegarle a él. Y la pareja salió a defenderlo, ¡es un tema humano, no futbolística! Sobre las palabras de la gente de Platense, no voy a hacer comentarios. Sería bajar al nivel de ellos y no quiero hacerlo”, concluyó.
