La Policía uruguaya detuvo en las últimas horas a un integrante de la mafia calabresa que estaba requerido desde el año 1995. El director de Crimen Organizado e INTERPOL explicó a UNICOM cómo se dio el operativo.
La detención se dio en el marco de la operación «Calabria» realizada en nuestro país donde detuvieron al prófugo de la Justicia italianaRocco Morabito.
Morabito poseía una notificación de color “rojo” (de acuerdo a la importancia de la requisitoria) por parte de la Justicia italiana desde 1995, la que fue reiterada en 2008. Es acusado de tráfico de drogas y otros delitos vinculados.
La investigación
El director de Crimen organizado e INTERPOL, comisario general Julio Senna, explicó en una entrevista realizada por UNICOM, que la operación comenzó a fines de marzo de este 2017 y apuntaba a una persona de nacionalidad brasileña cuyo ingreso al país data del año 2004, aproximadamente.
En ese sentido, se realizó una vigilancia y un análisis de los movimientos de esta persona y su familia, coordinados por el Juzgado de Crimen Organizado y Fiscalía de 2do Turno. Se hizo una búsqueda en los sistemas de información policial (SGSP) donde encontraron una coincidencia con las huellas dactilares aportadas por la Policía italiana.
Fueron confrontadas con las de la Dirección Nacional de Identificación Civil y surgió la certeza de que se trataba del ahora detenido.
Morabito se encuentra entre los 10 más buscados a nivel mundial, estaba registrado en Uruguay bajo el nombre de Francisco Antonio Capeletto Souza y vivía en Maldonado. Vino desde Brasil con documentos falsos, incluso ubicaron “una partida de nacimiento falsa brasileña, donde obtuvo la documentación. Con esos documentos ingresó a nuestro país y tramitó la documentación uruguaya falsa”.
La detención
Se realizó cuando este se hospedó en un hotel de Montevideo, el pasado 1º de setiembre. Morabito llevaba consigo 13 celulares, varias fotos carné, una pistola automática, más de 20 chips, una importante cantidad de dinero en moneda nacional y extranjera, y documentos obtenidos en nuestro país con nombre falso.
Consultado sobre una información en torno al detenido acerca de que el mismo quiso inscribir a su hija en un centro de estudios, bajo su nombre; el director aseguró que si bien la información es real, “no pudimos llegar -a través de ella- a su localización; le pedimos información al CODICEN pero como los centros enseñanza privados no están obligados a aportar la información, no pudimos llegar a él”.
El director sostuvo que también “es real que la hija está en nuestro país, bajo el apellido Morabito al igual que su esposa, de nacionalidad Angoleña (y pasaporte portugués)”.
Esta Dirección se puso en contacto con un agregado de la Policía italiana quien se encuentra en nuestro país y está manteniendo contactos con el Juzgado a cargo del caso, para interiorizarse de la situación del detenido.
Rocco Morabito fue procesado por uso de documentación falsa y a su vez la Justicia dispuso su arresto administrativo con fines de extradición. Deberá cumplir la condena por estos delitos en nuestro país, para luego ser extraditado y juzgado en Italia.
Por su parte, esta investigación continúa en proceso; “hemos enviado a analizar los celulares y los chips a la Dirección Nacional de Policía Científica” y que “están compartiendo información con la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas que es la unidad especializada en el tema de drogas por lo cual tiene requisitoria esta persona, para establecer si hay vínculos de otras personas en nuestro país”, resaltó.
La vida en Uruguay
De acuerdo a las investigaciones realizadas por INTERPOL Uruguay, esta persona se dedicaba al arrendamiento de campos para producción, no tenía un ingreso fijo y se le adjudica un establecimiento rural en Maldonado, el cual vendió hace 4 meses, lo que le generó un buen monto en dólares que le permitía subsistir.
Por otro lado, el director indicó que el tipo de notificaciones que maneja la INTERPOL tiene 7 diferentes tipos de nivel, siendo las de color rojo las que tienen mayor prioridad.
“Hay miles de personas requeridas a nivel mundial, si Uruguay no tiene una alerta especifica que diga que una persona puede estar en nuestro país, no se investiga”, explicó Senna y agregó que esto es porque no hay certeza de que la persona esté realmente y también significa el empleo de recursos en forma negativa, “por lo que priorizamos las investigaciones cuando hay indicios y certezas de que el requerido esté en nuestro territorio”, finalizó.