Es lo que faltaba para completar, los trabajadores de las plantaciones de marihuana legal detrás de la cárcel de Libertad están en conflicto y detuvieron sus tareas.
Hace tiempo que piden algunas reivindicaciones ya que están trabajando en pésimas condiciones.
Hace un año que están solicitando ropa de trabajo, ya que trabajan con sus ropas particulares, piden que un transporte los lleve hasta las plantaciones, ya que los caminos vecinales que los llevan están en muy estado y destrozan sus vehículos particulares.
También que se cumpla la promesa de la empresa que dijo cuando fueron contratados se les pagaría presentismo y nunca lo han abonado.
Aseguran que las condiciones generales de trabajo son muy mal y la empresa no dialoga, están como abandonados allí.
La empresa prácticamente no reconoce el sindicato que está formado y no acepta dialogar.
Lo increíble ocurrió cuando estos trabajadores quisieron volver a la plantación y les fue prohibido el ingreso por parte de funcionarios de la Guardia Metropolitana, que armados hasta los dientes custodian la plantación de marihuana.
Los trabajadores aseguran que si no entran rápidamente habrá consecuencias graves en la producción.
Lo curioso fue cuando una camioneta (en la fotografía) de presidencia de la Repúblico llegó al lugar y los empleados quisieron dialogar, ni siquiera los buenos días les dieron, los ignoraron, como si no les hablara nadie.
