Cada 8 de marzo se conmemora mundialmente el Día Internacional de las Mujeres. Se trata de un día de reflexión y de lucha, además de un reconocimiento al proceso histórico de reivindicación de las mujeres por la igualdad de derechos y oportunidades.
Al mismo tiempo, representa un llamado de atención a la sociedad acerca del camino que resta transitar para el logro efectivo de la igualdad.
El Consejo Nacional de Género y el Instituto Nacional de las Mujeres del MIDES eligieron la consigna “Más igualdad, compromiso de Estado”, para reafirmar el compromiso político de superar la discriminación y las desigualdades de género.
En este marco, el acto central será el 7 de marzo a las 9.00 hs en sala Zitarrosa y se presentará la Estrategia Nacional para la Igualdad de Género al 2030, que constituye la hoja de ruta del accionar del Estado en igualdad de género a mediano plazo.
Estrategia 2030
Dicha estrategia mira y analiza el presente y los procesos históricos de desigualdad que sufren las mujeres en el país para delinear un horizonte de igualdad de género al 2030.
El gobierno asume un compromiso político a mediano plazo porque entiende que un mejor futuro se construye y se piensa hoy.
Propone para ello un conjunto de aspiraciones, directrices político-institucionales y lineamientos estratégicos capaces de influir en las decisiones de política pública.
Acuerda los pilares sustantivos para la transversalidad de la política de igualdad con participación ciudadana y de las diversas organizaciones sociales.
Uno de los elementos de mayor impacto para el diseño e implementación de planes y programas ha sido la inclusión de una mirada compleja en el análisis de las desigualdades que viven las mujeres, identificando la multiplicidad de factores que la producen.
La política pública debe tener la capacidad de respuesta particularizada a la ciudadanía en el marco de propuestas universales. Así, la condición socioeconómica, la ascendencia étnico-racial, la edad, la identidad sexual y de género, la condición de discapacidad y el territorio donde se vive, se señalan como factores significativos que multiplican las vulnerabilidades de las mujeres a la discriminación y desigualdad.
Esta estrategia acompaña la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ambos esfuerzos de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) en la definición de la Estrategia Nacional para el Desarrollo 2050.
Asimismo, recupera como aportes sustantivos las diversas agendas de las mujeres y de feministas. Fue construida de manera participativa y en diálogo con la sociedad civil organizada.