La semana pasada informábamos que una especie extinta en Uruguay por más de un siglo volvía a probar suerte en el territorio. Tras un acuerdo entre el bioparque Mbopicuá y la Dinama, se liberaron cien pecaríes de collar (especie autóctona que no se ve en el país desde fines del siglo XIX) en el medio silvestre.
Las autoridades mantuvieron en secreto los lugares en que fueron liberados y también demoraron un mes en hacer pública la noticia justamente para evitar que los cazadores furtivos hicieran mella en la población recientemente liberad.
Además, las autoridades los liberaron en un área de más de 83.000 hectáreas para minimizar el impacto de los cazadores, algo que ya estaba en los cálculos del proceso de reintroducción.
Pese a ello, se constató que desde hace al menos una semana cazadores furtivos y sus perros están matando a los pecaríes, algo expresamente prohibido por ley.
Videos difundidos por el grupo Conservación y Biodiversidad del Uruguay muestran a cazadores vanagloriándose de la captura de varios de estos animales. Se ve a varios perros mordiendo a los pecaríes y luego a otros animales ya muertos.
Otra organización, Coendú, también denunció ayer que «el sueño de reintroducir una especie extinta hace un siglo podría frustrarse por culpa de cazadores furtivos que a pocos días de ser liberados los pecaríes de collar, ya comenzaron a matarlos con perros y rifles».
La Dinama, sin embargo, previó algunas operaciones de control y pudo detener ayer a varios de estos cazadores, tras coordinación con la policía. Se encontró evidencia de animales faenados y además se incautaron las armas y también los perros usados en las cacerías.
Según explicaron del organismo a Montevideo Portal, los cazadores ingresaron a un predio privado (de 7.000 hectáreas) con armas, para cazar a los pecaríes.
Con ayuda de la organización Coendú, la policía y un cazador que actúa dentro del marco legal y dio algunos datos, se pudo identificar a los responsables.
Tras obtener una orden judicial, se ingresó a los domicilios de tres cazadores y las autoridades los encontraron, literalmente, con la carne en el horno. No sólo de pecarí sino también de carpincho, otra especie que no se puede cazar. Se decomisaron las armas, el vehículo usado y los perros.
Los técnicos de la Dinama continúan hoy en el lugar para dar charlas a los vecinos sobre la importancia de la especie y para aclarar que se seguirá controlando, con asistencia de la policía.
La otra parte
Previo a estos operativos, la Dinama dio charlas en las cinco escuelas que están en los alrededores de la zona en la que fueron liberados los animales, a fin de explicar de qué animal se trata, diferenciarlo del jabalí y aclarar que está prohibida su caza. Los técnicos de Fauna también hicieron charlas para los trabajadores de campo del área.
Además, se realizó un monitoreo de los animales con la instalación de cámaras trampa para ver su movilidad, y se hicieron recorridas sistemáticas en la zona. En una de ellas, de hecho, se encontraron restos de pecaríes cazados, que dieron la pauta de que estaban actuando cazadores furtivos. El video fue la confirmación.
Todo este operativo se sumó a los trabajos hechos para la reintroducción, que incluyen el estudio de la parte genética, sanitaria y un acostumbramiento a la dieta para que subsistan en libertad.
Desde la Dinama explicaron a Montevideo Portal que no hay forma de solucionar de raíz el tema de la caza «si no hay un compromiso social». «No se puede tener una persona por animal. No hay monitoreo que garantice el éxito si no nos implicamos todos», agregaron desde el organismo, tras resaltar el «impacto emocional» que sufrieron tras ver las imágenes. A continuación uno de los videos, aunque se advierte que algunas imágenes pueden herir la sensibilidad del lector.
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