La derogación del delito de abuso de funciones fue aprobada ayer en la Comisión de Constitución y Códigos del senado por cinco votos a cuatro y pasará al plenario de la Cámara Alta en los primeros días de junio.
El delito de abuso de funciones se clasifica como innominado por su falta de especificidad en cuanto a las conductas a las que refiere, lo que- a opinión de los partidarios de la derogación- deja al magistrado un espacio muy amplio para la interpretación de los hechos.
La discusión llegará a la Cámara Baja a mediados de junio y allí no se descarta un acuerdo entre oposición y oficialismo.
El diputado del Frente Amplio, Alfredo Asti dijo a Montevideo Portal que en lo personal “aceptaría de que se limitara la discrecionalidad del juez poniendo tipificando algunos delitos que podrían entrar en esa categoría”.
“La propuesta por ahora es la eliminación, veremos qué propuesta puede haber o alguna redacción alternativa”, señaló.
De todas maneras señaló que la opción que más recomienda la cátedra es la derogación. “La mayoría tienen sus propios artículos, acá tiene que estar claramente definido que debe haber perjuicio para el Estado o para terceros, pero que no suceda, como sucedió que no hubo perjuicio para el Estado sino ganancias y fueron dos personas procesadas”, afirmó en referencia al caso de Fernando Lorenzo y Fernando Calloia.
En sintonía con sus pares oficialistas reiteró que la iniciativa de la derogación “no tiene nombre propio”, señalando que en ambos casos el daño ya se produjo. “No se puede decir que es por ellos porque los dos han visto afectada su carrera política, atribuir que esto se hace por ellos sería más injusto de lo que fue”, agregó.
“Si la alternativa concita las voluntades mayoritarias y el aval de la cátedra bienvenida sea esto no se debe considerar un tema partidario, es un tema que tiene que buscar dar garantías a todo el sistema judicial y político de que no puede haber arbitrariedades”, agregó.