Con el arzobispo de Montevideo Cardenal Daniel Sturla a la cabeza, este miércoles la Iglesia presentó ante la prensa las conclusiones de una investigación que se realizó este año luego de abrir un teléfono (en abril) para recibir denuncias sobre abuso a menores o adultos por parte de sacerdotes.
Se investigaron 40 denuncias, y algunas se remontan al año 1945. Según se informó, 20 de los sacerdotes denunciados fallecieron, siete fueron hallados inocentes y nueve aún son investigados.
Además, cuatro sacerdotes fueron separados de su magisterio, informó Sturla.
De estos cuatro, dos fueron denunciados por abusar de menores y otros dos por tener sexo con mayores de edad. Tres de los cuatro confesaron su culpabilidad.
Sturla dijo que la mayor cantidad de denuncias fueron recibidas en las semanas siguientes a la apertura de la línea telefónica, y que en los últimos cinco meses no se recibieron denuncias.
Algunos casos se cerraron en el momento porque las víctimas no ratificaron la denuncia. En otros casos no había fundamentos y en otros, dijo el Cardenal, las personas solo buscaban hablar con la Iglesia.
También se explicó que si la denuncia es de un caso actual o reciente, e involucra a un menor de edad, la Iglesia hace la denuncia de inmediato ante la Justicia.
Si la denuncia involucra a un mayor de edad entonces se invita a la víctima a realizar la denuncia. “No lo podemos obligar a hacerla”, explicó Sturla.