DEMOCRACIA: UN SISTEMA TEMIDO EN USA

Los Estados Unidos no fueron fundados como una democracia. La Constitución de ese país no menciona la democracia en ninguno de sus artículos.  La palabra «democracia» no se menciona en la Declaración de Independencia y no aparece en la Constitución de ninguno de los 50 estados que componen esa organización política.

Resulta muy  interesante revisar el pensamiento de los fundadores del país que hoy ostenta la supremacía mundial, y que presume de demócrata. Los firmantes, delegados y autores de la Declaración de Independencia y de la Constitución de los Estados Unidos de Norteamérica, temían a la democracia. Veamos algunas declaraciones muy elocuentes:

Alexander Hamilton, delegado por Nueva York, advirtió: “si nos inclinamos mucho a la democracia, caeremos pronto en una monarquía»  Edmund Randolph, delegado a la Convención Constitucional por el estado de Virginia, afirmó: «la democracia lo envidiará todo, contenderá con todo, se empeña por acabar con todo; será vengativa, sangrienta y cruel.»  Elbridge Gerry y Roger Sherman, Delegados de Massachusetts y Connecticut, urgieron y encarecieron a la Convención Constitucional crear un sistema el cual eliminaría «los males que experimentamos,» diciendo que esos «males…fluyen de los excesos de la democracia.»

El propio John Adams, segundo presidente de los Estados Unidos, dijo que había que “refrenar si es posible, la furia de la democracia», y habló de la «turbulencia y disparates de las democracias”. Su pensamiento coincide con el de  James Madison  coautor de la Constitución, y cuarto Presidente del país, quien afirmó: «Las Democracias siempre han sido espectáculos de turbulencia y contención; siempre se han hallado incompatibles con la seguridad personal o los derechos de propiedad”.

¿Debería sorprendernos  que la campaña electoral en marcha en USA se resuma a elegir entre dos candidatos que desprecian la democracia? Tanto Donald Trump como Hilary Clinton representan el poder del dinero, no de los intereses populares. Son actores de un sistema plutócrata, no demócrata. Gane quien gane, el mundo no puede esperar  que se ocupen de fortalecer la democracia, porque ese nunca ha sido el propósito de la clase acomodada a la que representan, la que se las ha arreglado para mantenerse en el poder desde  1776 hasta ahora.

>Aníbal Terán Castromán