Sudáfrica lanzará el miércoles un ensayo clínico de una envergadura inédita destinado a probar una vacuna experimental contra el sida, después de treinta años de esfuerzos en vano.
Bautizado HVTN 702, el estudio, que empezará este miércoles, implicará durante cuatro años a más de 5.400 voluntarios, hombres y mujeres sexualmente activos de entre 18 y 35 años, en 15 sitios repartidos por todo el territorio sudafricano.
Este ensayo clínico, uno de los más importantes jamás realizados, reaviva la esperanza de la comunidad científica.
«Si es utilizado al mismo tiempo que los métodos de prevención con eficacia probada que ya estamos usando, una vacuna segura y eficaz podría constituir el golpe de gracia contra el VIH», estimó Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID) de Estados Unidos.
«Incluso una vacuna moderadamente eficaz reduciría de forma significativa el peso de la enfermedad en países y poblaciones muy infectadas», añadió el responsable del NIAID, que participa en el estudio.
El hecho de elegir a Sudáfrica para probar esta vacuna a gran escala no es casual. Este país de África austral registra uno de los índices de prevalencia más elevados del mundo (19,2% según Onusida). Más de siete millones de personas tienen el VIH en este país.
En el mundo, dos millones y medio de personas resultan infectadas cada año por el virus, que ha causado más de 30 millones de muertos desde los años 1980, según un estudio publicado en la conferencia internacional de Durban (este de Sudáfrica) en julio.
La vacuna «sudafricana», especialmente adaptada a las poblaciones locales, es una versión «reforzada» de una vacuna probada en 2009 en Tailandia en más de 16.000 voluntarios.
Ésta permitió reducir en un 31,2% los riesgos de contaminación, tres años y medio después de la primera vacuna.
La seguridad de la vacuna «sudafricana» ha sido probada con éxito durante 18 meses en 252 voluntarios. El nuevo ensayo quiere ratificar ahora su eficacia.
Pero, a pesar del optimismo que suscita esta vacuna, los especialistas insisten en la necesidad de no bajar la guardia frente a la enfermedad.
Los ensayos de esta nueva vacuna están dirigidos por los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de Estados Unidos, el Consejo Sudafricano de Investigación Médica (SAMRC), la Fundación Bill y Melinda Gates, los laboratorios Sanofi Pasteur y GlaxoSmithKline, y la Red de Ensayos de Vacunas contra el VIH (HVTN).