«Si te están rapiñando no es conveniente resistirse»

El ministro del Interior Eduardo Bonomi, dijo este lunes en declaraciones a En Perspectiva online que la investigación sobre el asesinato de Heriberto Prati en Carrasco Norte «avanzó mucho», aunque no dará detalles hasta que exista una resolución judicial.

El ministro indicó que «aquel al que lo están rapiñando con un arma a la vista, me parece que no es conveniente resistirse, en este momento que hay gente armada con síndrome de abstinencia o bajo los efectos de las drogas».

«Me llaman la atención robos chicos en que terminan pegándole un tiro en la cabeza a alguien. ¿En qué cabeza pasa eso? En esa situación me parece que no conviene la resistencia», manifestó, aunque reconoció que han ocurrido casos de «gente que les da las cosas y les tiran igual».

Bonomi contó que un amigo suyo, propietario de un supermercado, falleció en un asalto al intentar atacar a un delincuente. «La señora (del fallecido) estaba atendiendo en una caja» cuando un asaltante llegó armado al local.  «Él fue a su casa, agarró un arma y le dijo a su señora que no haga nada. En el momento en que fue tirar bajó el arma y le dio en la pierna (al delincuente). El tipo cayó, tiró a la cabeza y lo mató».

«Cuando se cruzan así, el que no es delincuente duda, y e que no duda tira primero», explicó. «Yo no me animo a decirle a nadie que se desarme si sabe tirar, pero si no sabe tirar es mejor que no se enfrenten» con los delincuentes, dijo el jerarca.

El pasado sábado, Prati, de 56 años de edad, bajó de su vehículo para defender a una amiga que estaba siendo víctima de un rapiña en el barrio Carrasco Norte. Enfrentó al delincuente y este sacó un revólver. La víctima de la rapiña, le lanzó la cartera y le suplicó que no le disparara al hombre. Pero el delincuente tiró a quemarropa y el hombre “cayó fulminado”, producto del impacto de bala que recibió en la cabeza.

La mujer aseguró a través de su cuenta de Facebook que a Prati «lo mataron a sangre fría» por $ 300. Incluso después que el ladrón le dio el tiro en la cabeza a la víctima, le exigió a la esposa del mismo que le sacara la billetera al hombre que se estaba desangrando en el piso, a sus pies, para poder llevársela.

Según información que pudo recabar El País a través de los vecinos, «el asesino vive en el barrio, a unas pocas cuadras de acá, a unos pasos. Y todos lo saben, incluso la Policía».

En este sentido, los vecinos que viven sobre la calle Horacio Acosta y Lara informaron que «hace unos 10 días soltaron a unos hombres que estaban presos», y que «desde ese momento hasta ahora no hemos tenido paz, todos los días pasa algo».

Los vecinos y la Policía apuntan directamente a que el homicida vino desde una vivienda que se encuentra ubicada dentro de un perímetro de cuatro cuadras aproximadamente, que está rodeado por las calles Horacio Acosta y Lara, General Nariño, Ricardo Areco y Avenir Rosell.

En dirección a ese lugar se escapó el delincuente con las pertenencias que pudo robar el sábado.

>Fuente