Los tiempos de la Justicia ponen aprueba un poco más la voluntad y perseverancia de un trabajador arrocero que reclama una indemnización por los graves problemas de salud originados en su ambiente de trabajo.
La audiencia realizada el lunes 13 de julio culminó con la decisión de la Jueza Marta Elena Salaberry de intentar nuevamente reunir tres expertos en una junta médica que presente un informe del caso Julio De los Santos. Esta decisión es consecuencia de que el informe presentado por el Departamento de Salud Ocupacional del Hospital de Clínicas, utilizado como alternativa ante la imposibilidad de formar una junta médica por falta de profesionales dispuestos a asumir esa responsabilidad en un primer intento, fue impugnado por la parte demandada argumentando que una de las firmantes del documento, la Dra Lorena Padilla, no ofrecía garantías de imparcialidad.
Bastó que la referida profesional confirmara en esta audiencia, que conocía a De Los Santos con anterioridad a su actuación pericial por haberlo atendido una vez en el marco del trámite de una gestión ante un organismo oficial para obtener cobertura asistencial. Este dato fue magnificado por el abogado de Arrozal 33, quien argumentó que ese vínculo desacreditaba a Padilla para actuar en un caso judicial donde se espera absoluta neutralidad por parte de los peritos.
Esta afirmación fue rechazada por el abogado del trabajador, quien indicó que de ninguna manera el simple hecho de haber tenido un contacto circunstancial previo en el marco de una rutina burocrática, podría ser utilizado como argumento para poner en duda la honestidad intelectual de quien se desempeña como Asistente en el Departamento que dirige el Profesor grado 5 Fernando Tomasina, ex decano de la Facultad de Medicina.
Finalmente, la Jueza Salaberry, considerando que el CPP ampara el pedido de una nueva pericia en estos casos, tomó la decisión de darle a las dos partes plazo hasta el 17 de julio para la presentación de tres nombres de médicos dispuestos a integrar una junta que se expida respecto a si la enfermedad es o no atribuible a las condiciones laborales del demandante. De esos seis nombres se sortearán en audiencia a cumplirse el próximo viernes 24 de julio, los tres que serán convocados. Quedó claramente establecido que será éste el último documento a incluirse en el expediente como información oficial en base a la cual se pronunciará la sede.
Cabe mencionar que la Dra Padilla respondió de manera muy firme y clara cada una de las preguntas del abogado de la empresa (Profesor Agregado de Derecho del Trabajo y Seguridad Social Grado 4 de la Facultad de Derecho de la UDELAR), quien en incisivo interrogatorio de alrededor de una hora buscó por todos los medios posibles debilitar la contundencia del informe que concluye sin lugar a dudas: “… estamos frente a una enfermedad profesional porque el trabajador no tenía dicha patología previo a su ingreso laboral en 2014 en la industria arrocera..” También afirma que “hay suficiente evidencia epidemiológica que refiere que existe una mayor prevalencia de dicha patología entre los trabajadores expuestos a polvo orgánico de granos”, y que “la neumonitis por hipersensibilidad por exposición a polvo orgánico, se encuentra dentro del listado de enfermedades profesionales reconocidas en el país.”
Es de mencionar que el mismo abogado en esta misma audiencia tuvo una actitud muy diferente frente al Dr Tomasina a quien no sometió a tal presión, limitándose solo a preguntar si mantenía lo expresado por escrito en el referido informe. Por supuesto que el interrogado respondió afirmativamente y ahí concluyó el careo.
En resumen, el largo camino judicial emprendido hace casi dos años por un trabajador de Arrozal 33 en reclamo de una indemnización por los graves problemas de salud originados en su ambiente de trabajo, se extiende un poco más. Mientras tanto su calidad de vida sigue deteriorándose, no así la convicción de que su demanda es justa y de obtener un fallo favorable, estará ayudando a otros trabajadores que como él padecen o padecerán enfermedades evitables en su ambiente laboral. ¡Fuerza Julio!
Aníbal Terán Castromán