Actualización sobre el material radiactivo robado

Este lunes autoridades del Ministerio del Interior afirmaron que se hallaron las tarrinas con material radioactivo que fuera hurtada este domingo y por el que se había alertado a la población. Se encontraron en la rambla de Punta Gorda, completamente sellada, tal cual era transportada, sin que fuera manipulada por nadie. Posteriormente se identificó y detuvo «al autor del hurto», según indicó la cartera en su página web.

Este domingo, tras el hurto de la tarrina de tres kilos de plomo, 100 mililitros de yodo 131 -material radioactivo-, las autoridades del Ministerio del Interior habían alertado a la población sobre las consecuencias que podría tener el contacto con ese producto. Según un comunicado emitido por las autoridades, el contacto con el material «provocaría problemas respiratorios, y lesiones en tejidos epiteliales y mucosidades».

Se solicitaba además a la ciudadanía «que en caso de encontrar el producto comunicarse con el servicio de emergencias 911».

Horas después, desde el Sistema Nacional de Emergencia (Sinae) se señaló que el «material radiactivo hurtado» es usado «en diagnóstico y tratamiento en Medicina Nuclear» y que solo podría ser afectada «la persona que abra y manipule el material».

El hombre fue identificado por investigadores de la Zona II de la Jefatura de Montevideo por la Cruz de Carrasco. Una vez aprehendido, indicó el lugar donde se descartó de ambas tarrinas. Fueron en dos volquetas, una de ellas en Rambla O’Higgins y Motivos de Proteo y la otra en Alejandro Fleming y Caramurú. Él mismo guió a los policías al lugar donde las tiró.

Ninguna de ellas tenía rotos sus sellos de protección.

El autor del robo, ahora detenido, fue examinado por personal médico así como los policías que actuaron en la operativa. Ninguno de ellos registró contaminación. Las volquetas fueron enviadas a la Facultad de Ciencias.

El material fue robado en Punta Gorda mientras era conducido desde el Aeropuerto a la Asociación Española.

«Se trata de un frasco de vidrio conteniendo un pequeño volumen líquido de iodo 131. Este frasco se encuentra en un contenedor de plomo y éste a su vez en un recipiente de metal cerrado herméticamente. Está debidamente señalizado con el símbolo y la palabra Radiactivo y el envase cumple con las Normas de Transporte», señalaban desde el Sinae.

«El otro material, que también cumple con estas normas, se encuentra además en un recipiente plástico similar al que se ha mostrado en las diferentes publicaciones que han circulado en los distintos medios. Este segundo material, que es un generador de Tecnesio, es un dispositivo de plomo que tiene adosada una pequeña columna similar a un tubo que contiene el material radiactivo», agregó el organismo, que trabajó el tema junto a la autoridad Reguladora Nacional en Radioprotección (ARNR) del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) y la Dirección Nacional de Bomberos (DNB) del Ministerio del Interior (MI).

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