El camino de Santiago (IV)

El camino de Santiago (IV)

Hay varias formas de hacer el camino. Las personas pueden ir solos o en grupos, cargando su mochila y quedándose en albergues o refugios municipales, donde se deja dinero a voluntad, otros, son gratuitos.

No es aconsejable hacer el camino solo, en especial si no se conoce el país o la región. También existen problemas de seguridad, si bien no son frecuentes, hay que tomar precauciones.

Es muy importante informarse sobre lo básico que tiene que llevar la mochila de un/a peregrino/a. En nuestro caso, la furgoneta que nos llevó al camino, nos trasportaba las mochilas o valijas que llevábamos.

Para el camino portábamos una mochila pequeña, equipada con agua, frutas, barras de cereales, bocadillos (los clásicos refuerzos) documentos, cámaras y /o teléfonos móviles.

En los últimos 100 km hay bares y refugios/albergues. Se venden alimentos para la ocasión, bebidas, jugos, “servicios” (baños). Antes de elegir un camino hay que observarlo bien con los recursos informáticos que tenemos hoy. Por ejemplo hay sitios donde en muchos kilómetros, no hay ningún tipo de servicios (bares, comercios, refugios)

Caminando tanto, no es aconsejable estar demasiado tiempo sentado porque el cuerpo se enfría y si encima de eso, comimos más de la cuenta, el resto del camino se nos hace difícil.

Uno aprende sobre la experiencia que el desayuno es clave y que el resto del día se sobrelleva con agua, jugos, bocadillos, fruta.

>Maria Angela Pereira Ramirez