El hecho de tener derecho a reparar nuestras posesiones con total libertad, sin tener que pasar por el fabricante suena muy bien. Pero esto es algo con lo que no comulgaba John Deere, un fabricante de tractores que generó una gran polémica a raíz de la obligación de tener que reparar sus tractores en sus talleres. Pero los usuarios decidieron que esto no les terminaba de gustar, y pasaron por una solución mucho más rápida: hackear los tractores.
Este tipo de obligaciones hace que se cree una práctica anticompetitiva al no permitir a los granjeros a reparar sus tractores donde les plazca. Esto es algo que era muy común en numerosas empresas como por ejemplo en el campo de la telefonía, pero hasta aquí hubo soluciones como por ejemplo el kit de reparación que ofrece Apple para sus móviles. Y esta ola de cambios también ha terminado llegando al polémico fabricante de tractores.
Y es que tras todas las acusaciones que ha recibido, y la solución de hackear los tractores para poder repararlos ha hecho que John Deere acabe rindiéndose firmando un acuerdo para garantizar el derecho de reparación a los agricultores.
Con este acuerdo se ofrecerán las herramientas, códigos de diagnóstico, manuales, guías de producto y en definitiva todo lo necesario para que se realice la reparación. Esto hace que el agricultor pueda optar por llevar su tractor a un taller que no sea el oficial para conseguir una reparación de manera general mucho más económica. Y todo eso sin tener que hackear el software para realizar correctamente el arreglo.
Pero los hackeos que se practicaron sobre el software de los tractores no han gustado, y ha quedado materializado en este acuerdo. Concretamente, se detalla que los propietarios y técnicos no pueden poner en peligro las medidas de seguridad y los protocolos de los equipos. De esta manera, se podría interpretar que si se lleva el tractor a un taller donde se modifique el software se puede llegar a perder la garantía.
Aunque se debe destacar que también ha influido la presión legislativa del gobierno de Estados Unidos que había propuesto una nueva ley para garantizar que los usuarios pudieran reparar sus productos donde quieran. Pero han decidido adelantarse y parecer que están a favor de estas medidas sin que se les termine imponiendo a través de la vía legal.
Genbeta