En la Mesa de Desarrollo Rural Eje ruta 7 del departamento de Cerro Largo se presentó este miércoles 26 de mayo, el proyecto “Escalamiento en el uso del hongo patogénico en el control de la garrapata bovina”, desarrollado por el Instituto Bio Uruguay (Batoví Instituto Orgánico-Uruguay) que ha recibido en años anteriores apoyo del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca a través de la Dirección General de Desarrollo Rural (MGAP- DGDR) mediante el llamado Más Tecnologías para la producción familiar, y con apoyo técnico del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA).
Participaron de forma virtual más de 80 personas, integrantes del equipo territorial del MGAP en Cerro Largo, referentes de gobierno departamental, de instituciones privadas, productores rurales, organizaciones y agentes territoriales de la zona, como la Sociedad de Fomento Rural de Cerro Largo, y representantes de AUGAP (Asociación Uruguaya de Ganaderos de Pasto), entre otros.
Comenzó el ministro de Ganadería, Carlos Uriarte, que aclaró que su participación era como productor y destacó “lo efectiva que es esta herramienta para brindarle a los productores del campo que sobre todo este año hemos sufrido tanto la garrapata”.
El director de Desarrollo Rural, Carlos Rydström, comentó que el proyecto “se apoya en bases agroecológicas que es producir de manera más amigable con el ambiente (…)va de la mano de un cambio de chip en el enfoque a la ganadería porque no es simplemente una visión de la solución en un frasquito o en una vacuna o en una toma, es un cambio de concepto en la producción en el cuidado del ganado, de la pastura, del sistema como un todo, va en la lógica de la intensificación sostenible de la producción agropecuaria sobre el campo natural, (…) es una política sanitaria por eso hemos trabajado mucho con la Dirección General de Servicios Ganaderos. Y también es una política de Desarrollo Rural, por eso nuestro interés en difundir en esta Mesa y en la de Paysandú”.
La Dra. Alda Rodríguez, integrante del instituto Bio Uruguay, hizo la presentación del proyecto. Explicó que “de esta experiencia de investigación participativa buscando alternativas para solucionar el problema de la garrapata”. Comentó que “en nuestro país y en la región hay una necesidad imperiosa de encontrar alternativas como un pool de herramientas complementarias, y disminuir el impacto de los químicos, para mantener los requisitos de inocuidad de estos alimentos en los mercados de carne…se ha visto también que los principios activos de los químicos garrapaticidas han ido encontrando resistencia”.
La estrategia es “a partir de los agroecosistemas productivos, buscar organismos que vivan en el suelo como los hongos entomopatógenos que tengan un efecto de reducción de la población de esta plaga”. Explicó que desde los animales o desde el suelo se realizan aislamientos de hongos nativos que se multiplican en condición de laboratorios o de biofábricas, para conseguir un biogarrapaticida, que se esparce mediante esporas en campo o en animales. Estos hongos en una etapa de su vida están viviendo de la materia orgánica del suelo, y cuando se encuentran con un artrópodo como la garrapata, le provocan enfermedades que le causan la muerte.
Como antecedentes exitosos de este proyecto, BIO Uruguay asociado con la Cooperativa de Productores de Leche de Tacuarembó (COPLT), recibieron apoyos a través del llamado Más Tecnologías de MGAP/DGDR/INIA, en su primera edición en el período 2015 – 2016. La Cooperativa aplica biogarrapaticida desde el 2016, aplicado en campo de recría en usufructo, del Instituto Nacional de Colonización.
La segunda edición de Más Tecnologías (2018-2019), financió un nuevo proyecto para la obtención de resultados con su aplicación en baños de inmersión, la generación de pautas y avances de la metodología innovadora de aislamientos de hongos nativos y la multiplicación y aplicación por parte de los productores en sus predios, que fueron asesorados y enseñados por BIO Uruguay.
El MGAP considera relevante la generación de estrategias eficientes de control de garrapata en los sistemas ganaderos y lecheros del país, dada la experiencia positiva del proyecto culminado y probado en predios de productores lecheros y ganaderos de Tacuarembó. En ese camino y con este nuevo convenio que pretende extender a otros departamentos como Cerro Largo y Paysandú, es que se presentó en la Mesa de Desarrollo Rural eje ruta 7, para captar productores ganaderos interesados en aplicar esta tecnología innovadora que promueve al cuidado del medio ambiente mediante procedimientos agroecológicos.
En esa línea se busca profundizar el conocimiento de la presencia de estos agentes de control como parte de ecosistemas naturales, su relación con los manejos agroecológicos-regenerativos, y evaluar su aporte en el logro de sistemas ganaderos resilientes. Difundir y capacitar a técnicos y productores acerca de las técnicas de uso y manejo de hongos patogénicos nativos, y su rol restaurador del equilibrio natural.
Rodríguez destacó concluyendo que el proceso de co-innovación muestra caminos para avanzar, generando resultados reales y aplicables, para el sector productivo, institucional y de recursos humanos. Los resultados obtenidos dan pistas de una nueva lógica de manejo de plagas en base al cuidado de la biodiversidad y su importancia.
En el cierre intervino la asesora técnica de DGDR, Karina Gilles mencionando los criterios técnicos para seleccionar predios de productores, que puedan participar en esta tercera etapa del piloto. Se trabaja pensando en que este piloto se multiplique y tenga impacto, y en ese marco resaltó “lo que estamos viviendo ahora, la amplia participación de todos ustedes, acercar el tema y el trabajo” de la Dra. Rodríguez. Finalizó “vamos a buscar las alianzas para poder dar oportunidades, seguir trabajando en la difusión”.