Alberto Martínez es un floridense que vivía pegado a la casa del joven imputado por el accidente de tránsito fatal ocurrido hace un año en el Prado Piedra Alta donde perdieron la vida Lucía Borges y Saraí Arbelo.
En su momento Martínez aportó el video de sus cámaras de seguridad que demostraron que el joven imputado con prisión domiciliaria había incumplido su medida cautelar, lo que derivó en la prisión efectiva que luego fuera revocada tras apelación de la defensa.
Martínez denunció horas atrás frente a las cámaras de TV Florida que “el padre del chiquilín me hace la vida imposible”.
“Me hace pinturas en la casa, me arranca pegotines”, detalló, agregando que “me vive haciendo denuncias”.
Martínez tiene un hogar de ancianos y aseguró que “la otra vez me denunció por maltrato a los ancianos”.
Enfatizó que “no me deja tranquilo, no sé qué hacer ya”, afirmando estar seguro que se trata del padre del imputado.
“No es justo que me siga haciendo la vida imposible”, subrayó.
Martínez recordó que se involucró en el caso cuando declaró en julio del año pasado que el joven violaba las medidas cautelares, incluso aportó videos registrados por sus cámaras de videovigilancia.
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