No tan insólito: gases acumulados en el intestino de una paciente provocaron una explosión e incendio

Una pequeña aunque inesperada explosión provocó un incendio días atrás en un sala de cirugía de un hospital en Tokyo, Japón. Lo sorprendente fue el origen de la llamarada. El fuego se generó a partir de gases expulsados del cuerpo de la mujer que estaba siendo sometida a una operación de cuello de utero.

Según explicaron los médicos al medio local Asahi Shimbun, el segundo periódico más vendido en Japón, el incendio comenzó cuando la súbita flatulencia entró en contacto con el láser usado por los cirujanos del Tokyo Medical University Hospital.

El fuego quemó la mayor parte del cuerpo de la mujer de 30 años, así como también su cintura y sus piernas.

Según el informe realizado por un comité de expertos externos en la sala de operaciones no habían materiales inflamables que pudiesen ocasionar el fuego, lo que confirmó a la flatulencia de la paciente como el causante del incidente.

El neurocientífico Robert R. Provine describió este fenómeno en su libro “Curious Behavior: Yawning, Laughing, Hiccupping, and Beyond” (Comportamiento curioso: bostezo, risa, hipo y demás), en donde indica que sólo una de cada tres personas produce “niveles relevantes de metano” como parte del gas de la flatulencia. Aunque aclaró que estos niveles pueden elevarse considerablemente si se ingiere brócoli o repollo.

Provine registró en su libro de curiosidades médicas un caso que resultó letal. “Un intestino muy gaseoso puede ser fatal, como lo fue para un paciente cuyo pólipo de cólon estaba por ser cauterizado. Una chispa eléctrica causó que los intestinos del paciente explotaran, haciendo detonar la colonoscopia y provocando un agujero de seis pulgadas en el intestino grueso del paciente”, describió de manera sorprendente el especialista.

Científicos de la Universidad de Atenas, en Grecia estudiaron el fenómeno y publicaron un estudio llamado “Colonic gas explosion during therapeutic colonoscopy with electrocautery”. En el paper, el equipo de médicos integrado por Spiros Ladas, George Karamanolis, y Emmanuel Ben-Soussan, advierten sobre los peligros de la electro-cauterización durante una colonoscopía dado que demostraron la relación con las explosiones por gas humano.

El grupo de médicos liderado por Ben-Soussan, señaló que en las estadísticas que se pudieron recabar entre 1952 y 2006, se registraron sólo 20 explosiones de intestinos por acumulación de gas frente al calor del láser. Si bien es raro, el episodio se puede volver a producir si encuentra las condiciones necesarias. A raíz de esto, la solución propuesta por los expertos para evitar estallar en el quirófano es «un buen purgante o laxante», aplicable de diversos modos según la afección y el paciente.

TN

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