Montero señaló a Comunicación Presidencial que se están estableciendo los criterios de densidad mínima e impacto ambiental para llevar adelante obras de saneamiento, así como la forma de financiación más efectiva para el organismo.
Aseguró que se analiza construir nuevas plantas de tratamiento y disposición final de los efluentes transportados por barométricas o mejorar las existentes, junto con las administraciones departamentales, la OPP y el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial, a fin de lograr una solución a este tema y utilizar una parte de la tarifa de saneamiento para cofinanciar estas obras.
La propuesta implica brindar un servicio de recolección de líquidos por parte de barométricas para aquellas localidades de entre 500 y 3500 habitantes. El aumento de plantas reducirá el recorrido de cada camión recolector.
Dentro del plan de trabajo interinstitucional se procura contar con un asesoramiento técnico y financiero para la construcción, mantenimiento y uso de un sistema de tratamiento y disposición adecuado a las realidades locales y capaz de lograr una calidad de efluente final que respete a la normativa ambiental.
«El servicio de líquidos barométricos no es propio de OSE, pero sería una buena noticia formar parte, porque puede ser el origen de una solución complementaria a esta problemática», manifestó Montero.
Llamado a expresiones de interés para planta de tratamiento de lodos en Aguas Corrientes
El organismo publicó en la Agencia Reguladora de Compras Estatales un llamado a expresiones de interés para iniciativas privadas, a fin de seleccionar la solución más conveniente para la gestión integral de los lodos generados en la planta potabilizadora de Aguas Corrientes, que incluya consideraciones técnicas, económicas, ambientales y sociales. “Es una deuda que tiene OSE con el país”, señaló Montero.
Según el jerarca, este anuncio se enmarca en los objetivos de la empresa en cuanto a promover buenas prácticas ambientales, así como profundizar la aplicación de la normativa vigente respecto de los procesos industriales de la potabilización del agua y los efluentes vertidos asociados a estos.
Montero manifestó que las opciones que se han planteado insumen una inversión que oscila entre 30 y 50 millones de dólares y que se podría licitar a mediados de 2021. “Pueden aparecer ideas novedosas que nos hagan bajar los costos”, concluyó.
