El hecho, de connotaciones bizarras, sucedió el viernes 20 de noviembre en Agraciada, departamento de Soriano, y fue difundido por la Agencia Soriano de Noticias.
La policía de Soriano recibió una llamada denunciando un hurto en dominios de la Seccional 9na. de Agraciada. Por ese motivo, desde la Seccional 5ta. llamaron a la Seccional 9na. ubicada en De Los Treinta y Tres esquina Fructuoso Rivera, de Agraciada, no obteniendo respuesta.
Debido a esta situación, desde la Seccional 5ta. enviaron un móvil a la Seccional 9na. para averiguar porqué no respondían el llamado telefónico.
Según continúa informando la Agencia Soriano de Noticias, al llegar los efectivos a la Seccional 9na. la encontraron cerrada. Los dos efectivos que concurrieron, pudieron ver a través de una ventana, que el teléfono estaba desconectado y tirado en una papelera. También pudieron ver un handy y el correaje perteneciente a un funcionario policial, tirado en un cajón.
El Cabo y el efectivo de Policía Científica que acudieron a la Seccional 9na. quedaron desconcertados y decidieron esperar a que apareciera el funcionario que debía estar en la misma.
Luego de un tiempo, llega el móvil de la Seccional 9na, y desciende el efectivo que estaba a cargo, el cual vestía con la camisa del uniforme, un boxer, y medias. Los dos funcionarios no salían del asombro, consultado el encargado de la Seccional acerca de que había pasado, éste les respondió que había ido a la playa de la Agraciada “a sacarse los demonios de encima”, y continuó hablando otras incoherencias.
Los efectivos encontraron que el encargado de la Seccional tenía además, una botella de cerveza.
Llevado al médico, éste detectó que el efectivo policial estaba bajo los efectos de alcohol y cocaína. Posteriormente fue trasladado a un centro de salud de Dolores, ya que en Sicosocial de la ciudad de Mercedes no había cupo.
Continuando con la investigación del hecho, encontraron el arma del encargado de la Seccional, desarmada en una papelera.
ANSoriano