Un ciudadano de Canadá ha sido condenado esta semana a la pena de muerte en China por la fabricación de ketamina, una droga sintética, informa la agencia AP.
La Corte Intermedia Municipal de Guangzhou anunció la pena máxima a Xu Weihong, mientras que su cómplice Wen Guanxiong recibió la cadena perpetua.
En octubre del 2016 el canadiense Xu, junto al ciudadano chino Wen, recopilaron herramientas para fabricar la ketamina, un potente relajante muscular. Organizaron la producción de la droga en la casa de Wen, en el distrito de Haizhu. Durante el allanamiento la Policía encontró más de 120 kilos del narcótico en la vivienda y otro apartamento.
Las leyes antidrogas en China son muy duras, al igual que en muchos otros países asiáticos. Así la fabricación y el tráfico de drogas se castiga con hasta la pena de muerte.
La sentencia fue anunciada en medio de una alta tensión entre Canadá y China, aunque el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Wang Wenbin, dijo que la decisión del tribunal no tiene nada que ver con la relación entre los dos países.
La situación entre las dos naciones empeoró después de que la alta ejecutiva de Huawei, Meng Wanzhou, fue detenida en el aeropuerto de Vancouver en el 2018, por un supuesto fraude en los vínculos entre la compañía e Irán. Pekín consideró este arresto como un intento de impedir el ascenso de China como una potencia tecnológica y respondió con la detención del exdiplomático canadiense Michael Kovrig y al empresario Michael Spavor, acusados de delitos contra la seguridad nacional.