El ministro del Interior, Jorge Larrañaga, y el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, anunciaron que prohibirán que las personas que viven en situación de calle habiten espacios públicos y privados, y acordaron llevar adelante una serie de acciones para mantener las calles, veredas, parques y otros lugares libres de estos individuos.
«Como hemos dicho en varias oportunidades, los espacios públicos no constituyen un derecho de vivienda, por lo cual procederemos con las comunicaciones a disponer que esos espacios no tengan la ocupación», dijo Larrañaga tras el encuentro con el presidente.
El Ministerio del Interior es el encargado de desalojar a estas personas de todo lugar que ocupen. «Hemos dicho que los espacios públicos no confieren un derecho de habitación. ¡No es un derecho, no lo es!«, insistió Larrañaga vehementemente.
«El derecho que tiene ese ser humano es un derecho constitucional a la vivienda, a la vivienda digna. Y en esa línea vamos a actuar. Con el respeto, la ponderación y el cuidado del procedimiento del caso. Pero nos parece fundamental porque eso hace a la convivencia», continuó el jerarca.
Según él, en una sociedad «no se pueden tomar los pórticos de los edificios públicos o privados como lugar de habitación, extendiendo un nailon, un cartón o una lona» y que es una realidad que «todos tenemos que comprender».
El fin de semana pasado, un hombre de 53 años de edad que vivía en la calle fue encontrado sin vida en la zona de Paso Molino, el cual había fallecido de hipotermia.
Según informó a inicios de semana el ministro de Desarrollo Social, Pablo Bartol, el hombre ya había estado en un refugio. Además, contó que desde su cartera están trabajando para brindar más alojamientos a personas en estas condiciones.
