Al vehículo subieron dos hombres pero solo uno amenazó al chofer con un arma de fuego para exigirle el dinero. El otro se quedó en la escalera con la puerta abierta.
Un funcionario policial que viajaba como pasajero se identificó y dio la voz de alto cuando el delincuente lo apuntó con el arma. En ese momento el agente respondió más rápido y efectuó varios disparos.
El delincuente logró escapar del vehículo pero, en medio de la fuga, se dio vuelta para disparar. Fue allí que el policía tomó la decisión de seguir disparando y el ladrón cayó abatido en plena calle.
El delincuente presentaba una herida de arma de fuego con dos orificios de entrada y salida, una en el cráneo y otra en el tórax. El personal médico que lo asistió constató su fallecimiento en el lugar.