Dos de los efectivos rapiñados por delincuentes llevaban puesto el uniforme cuando fueron abordados. En varios de los episodios hubo intercambio de disparos.
El primer ataque, según indicaron fuentes policiales a El País, se dio cerca de las 22 horas del 18 de febrero en la intersección de las calles Espíritu Nuevo y Capitán Tula, Piedras Blancas. Tres delincuentes armados amenazaron a un agente que conducía su bicicleta por esas calles y le robaron la mochila, que tenía un termo adentro, y su medio de transporte. Cuando la víctima se identificó como policía se produjo un intercambio de disparos.
En las primeras horas de ayer, en Ruta 5 y Camino de la Redención, un agente perteneciente a Policía Científica fue atacado luego de frenar en la ruta para atender un llamado telefónico personal. Ahí fue alcanzado por dos delincuentes en moto. Lo amenazaron con armas de fuego y le exigieron que bajara del vehículo. Al ver que el agente llevaba un arma en la cintura, se la robaron. Luego se subieron a la camioneta del agente y fugaron en ella.
En Lucio Rodríguez y Samuel Lafone (barrio La Paloma) una efectiva de la Guardia Republicana fue rapiñada por dos delincuentes. La víctima conducía su moto y los delincuentes la interceptaron. Al indentificarse, dispararon su arma pero no lograron herirla. La policía repelió el ataque y realizó tres disparos.
Cerca de las 9:30 en Simón del Pino y Leandro Gómez (barrio Plácido Ellauri), otro policía fue abordado por dos delincuentes cuando iba a comprar una moto. Le robaron 17.000 pesos, el carnet policial y el celular.
Sobre las 18 horas, hubo un asalto a un almacén en La Cruz de Carrasco. Los dos delincuentes lograron llevarse el arma de reglamento del agente, perteneciente a la Guardia Republicana, que estaba uniformado al momento del asalto. El efectivo no resultó herido y los delincuentes lograron huir.
Ya de noche, a las 20.38 en Camino Aldabalde y Camino Socoman en La Paz, un policía se dirigía desde la casa de su pareja a la parada de ómnibus para ir a trabajar a la seccional 21 de Montevideo, cuando fue abordado por dos personas que lo amenazaron y le robaron su arma de reglamento.
El efectivo estaba uniformado y sin chaleco. No resultó lesionado.