Tierra de Jóvenes

El acceso a la tierra para los jóvenes es una “conquista social y de derechos”

Estas palabras fueron expresadas por Alixis Acosta, joven productor del grupo Aldea Avatí, en el lanzamiento de Tierra de jóvenes, el 23 de julio, en Casa Inju. Autoridades y jóvenes del medio rural intercambiaron ideas frente a unas 120 personas que asistieron a la presentación.

Tierra de jóvenes es una experiencia piloto dirigida a grupos de jóvenes de entre 18 y 29 años que deseen acceder a tierras para la producción agropecuaria con apoyo para capitalización, inversiones y asesoramiento técnico. Son dos las fracciones que están dentro de la propuesta: una en Canelones, en la Colonia Juan M. Laguna, a 7 km de la capital departamental; y otra, en Lavalleja en el Inmueble n.° 560, cerca de Villa del Rosario.

Esta iniciativa implicó el trabajo interinstitucional entre el Instituto Nacional de Colonización (INC), el Instituto Nacional de la Juventud del Ministerio de Desarrollo Social (INJU -MIDES) y la Dirección General de Desarrollo Rural del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (DGDR-MGAP). La convocatoria es el resultado de un largo proceso que implicó “romper los alambrados de las oficinas del Estado y trabajar de forma coordinada”, aseguró el director de la DGDR, José Olascuaga. Y agregó “no se construye solo desde una institución sino desde varias, la construcción de políticas públicas es un rompecabezas”.

El subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y ex director del INJU, Santiago Soto, felicitó al actual director del INJU, Federico Barreto, por el avance en las políticas públicas destinadas a las juventudes rurales. Asimismo, Barreto realizó un breve recorrido por el trabajo que significó llegar a la instancia del llamado a tierras y felicitó a los equipos técnicos de las instituciones.

En tierras del INC “nunca existió una línea de trabajo para jóvenes” aunque “sí hay jóvenes, que la pelean” dijo, la presidenta del INC, Jacqueline Gómez. Esta propuesta agrega “capacidades, conocimiento y recursos” para que los jóvenes “desarrollen su proyecto de vida en el medio rural” y para que éstos aporten “su poder dinamizador a las tierras del Estado”, afirmó Gómez.

“La tierra nos solucionó la vivienda, el trabajo, el alimento” es así que el acceso a la tierra “es algo más que lo productivo, es una conquista social y de derechos”, afirmó Acosta del grupo Avatí. El grupo Avatí es una cooperativa social, integrada por cinco jóvenes, que accedieron a tierras de Colonización en el año 2014, para desarrollar un emprendimiento de producción hortícola agroecológica en Rincón de Pando, Canelones, donde viven y trabajan.

Angélica Rodríguez, integrante de la Comisión de Juventud Rural de la Reunión Especializada de Agricultura Familiar (REAF), destacó que “en el diálogo entre las organizaciones y las entidades públicas, y hoy es un reflejo, la tierra siempre estuvo en la mesa de discusión”.

Por su parte, Germán Búrquez, también integrante de la Comisión de Juventud Rural de REAF, celebró las propuesta de las instituciones y aseguró que la demanda de tierras por parte de los jóvenes del medio rural es constante. La falta de políticas públicas para el acceso a la tierra y al crédito para los jóvenes surgió en un estudio realizado en el marco de la REAF así como en los distintos talleres en que participan jóvenes.

El Directorio del INC (Acta n.° 5457, del 14 de junio) definió que se valorarán las propuestas agroecológicas. El grupo Aldea Avatí trabaja con este sistema de producción, Acosta y Nauhel Piantanida, explicaron que es la forma más amigable que encontraron para trabajar entre ellos y con el medio ambiente y que se trata de producir con el menor impacto posible y cuidar al consumidor final del alimento. Asimismo, reconocieron que falta investigación e insumos para generar volumen de producción pero son áreas en las que se deberá seguir trabajando.

Datos de interés

La realidad actual de las juventudes rurales se presenta como un desafío para las instituciones públicas. Según datos de la Encuesta Continua de Hogares para el 2018, un 16,6% del total de las jóvenes -entre 14 y 29 años- reside en zonas con menos de 5.000 habitantes, definidas como Medio Rural Ampliado. A la vez, un 12,2% de dicha población, pertenece a hogares agro dependientes, es decir, cuyo ingreso principal proviene de la actividad agropecuaria. Sin embargo, sólo un 3,6% trabaja en el sector agropecuario, integrado en un 86,9% de varones, frente a un 13,11% de mujeres (ECH, 2018).

INC