Policía desleal intentó ingresar un arma a la cárcel

Un policía que cumplía funciones en la Unidad Nº 3 de la ciudad de Libertad, intentó ingresar un arma escondida en una consola de juegos.

El infiel funcionario intentó ingresar el arma disimulada en el interior de una consola de juegos. Las autoridades investigan por estas horas quién era el destinatario de la misma.

El personal de revisoría detectó el irregular ingreso al pasar por el escáner los bultos que pretendía ingresar al establecimiento, activando inmediatamente los protocolos de actuación previstos con la detención del involucrado y su comunicación a la Fiscalía competente.

Del relevamiento preliminar se pudo determinar la presencia de una pistola Bersa calibre 9 mm disimulada en el interior de una consola de juegos. De inmediato se procedió a la detención del infiel funcionario dando cuenta a la autoridad penitenciaria y a Fiscalía de Libertad, Dra. Morosini, quien dispuso incomunicar al cabo, incautación de la consola y celular del mismo, relevamiento fotográfico por parte del Departamento de Investigación y Análisis Penitenciario – DIAP – y volver a enterar.

Posteriormente, fueron inspeccionados los casilleros del personal que ingresa al turno, encontrándose los siguientes elementos:

  • – 7 celulares de alta gama
  • – 1 reloj
  • – $ 21.000 pesos en efectivo
  • – 5 cargadores de celulares

El DIAP investiga por estas horas la propiedad de los artículos incautados, a efectos de determinar si pertenecen al mismo funcionario que intentó ingresar el arma o a algún otro que cumpla funciones en el turno. El detalle de lo incautado también fue notificado a la Fiscalía competente.

Consultado el sistema de información policial surge que la pistola Bersa calibre 9mm fue denunciada por extravío en abril de 2012.

Este tipo de acciones son de una gravedad extrema para el sistema penitenciario y especialmente sensible para el personal policial en tanto un arma de fuego termina -en muchos casos- utilizándose para atentar contra la vida de algún interno o de los propios policías u operadores penitenciarios.

Fuente: INR

Montevideo, 11 de junio de 2018
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