La Federación Uruguaya de Empleados del Comercio y los Servicios (Fuecys) buscará con las autoridades del Ministerio del Interior con el objetivo de lograr una mejora en las medidas de seguridad en los supermercados.
Así fue decidido este domingo por el sindicato, luego que una cajera de 26 años, madre de un pequeño, fuera asesinada en las últimas horas por un delincuente que asaltó el local en el que trabajaba en la zona de La Blanqueada.
El pedido del sindicato a las autoridades será concreto: la aplicación de un protocolo de seguridad en este tipo de locales, una iniciativa que viene siendo discutida desde hace más de dos años pero que hasta el momento no fue implementada, según dijo a ECOS el dirigente Favio Riverón.
Allí está comprendido el incremento del patrullaje policial en las proximidades de supermercados.
Según Riverón, se le planteará asismismo a Interior la necesidad de un retiro paulatino del uso del dinero en efectivo de las cajas de este tipo de comercios.
En la reunión la Fuecys también planteará medidas en relación al reciente asalto a una remesa, que tuvo como resultado a un policía y a un guardia de seguridad heridos.
El dirigente evaluó en forma muy positiva el acatamiento al paro al que se convocó este domingo a raíz del crimen de la cajera.
La trabajadora muerta se había reintegrado el día que murió de su licencia y ganaba alrededor de $ 22.000 nominales a los que se sumaban las partidas por los denominados «quebrantos de caja». No estaba sindicalizada y de hecho el gremio del comercio no tiene presencia en Super Vero, la pequeña cadena en la que se desempeñaba
Fabio Riverón, presidente del sindicato, explicó a El País que se quiere evitar que los supermercados se transformen en un «Lejano Oeste» y que los trabajadores puedan verse atrapados «en el medio de una balacera». «No pasa por ahí. Pasa por la prevención del conflicto y el delito», consideró Riverón.