La empresa constructora NGE de Francia le comunicó al gobierno su intención «genuina» de participar en obras de infraestructura ferroviaria «a gran escala».
En una carta fechada el 19 de enero de 2017, el grupo NGE se dirigió al presidente de la República, Tabaré Vázquez, y le dio a conocer su voluntad de presentarse en la licitación del tramo Algorta-Fray Bentos, así como de presentar al gobierno una «propuesta formal» para financiar, construir y mantener la nueva vía férrea que requiere la instalación de la segunda planta de UPM en el centro del país.
«Nos complace confirmar formalmente ante su gobierno nuestro interés ya expresado por nuestra participación en la licitación de Algorta-Fray Bentos, para ser considerados como constructores de obras en proyectos específicos con la capacidad de proponer financiamiento si así se requiere», establece la carta.
El 5 de diciembre, Vázquez estaba en París invitado por el presidente francés, Francoise Hollande, para compartir la experiencia uruguaya en un encuentro sobre participación ciudadana y descentralización. Ese día el mandatario se reunión con representantes de NGE quienes le transmitieron por primera vez el interés del grupo de participar en las obras de infraestructura que requiere el país.
El presidente uruguayo no sólo les presentó el plan de desarrollo previsto por el gobierno en materia de infraestructura, sino que además les habló sobre las posibilidades que ofrecía la instalación de la tercera planta de celulosa. Esa comunicación tuvo su efecto.
«En lo que se refiere al megaproyecto UPM de producción de celulosa que usted nos presentó, estamos en condición, una vez de recibir la información necesaria, de presentar a su gobierno una propuesta formal incluyendo financiamiento, diseño del proyecto, su construcción y mantenimiento de la nueva vía férrea a ser construida para satisfacer las futuras necesidades de la planta UPM en cuanto a logística de transporte se refiere», afirma NGE en la misiva.
«Agradecemos considere usted esta carta como nuestra Carta de Intención en cuanto al genuino interés de la empresa NGE de participar con capacidad y excelencia en calidad de construcción de proyectos de infraestructura a gran escala, y poder de esa manera, ser partícipes y contribuir en el desarrollo de su gran país», culmina la nota que lleva la firma del director comercial internacional, Thierry Girard.
Búsqueda de inversiones.
Desde que se conoció la intención de la empresa finlandesa de hacer la inversión más importante de la historia del país, el gobierno se enfrentó a la necesidad de salir a buscar inversiones para poder cumplir con la exigencia principal de UPM: el mejoramiento de la infraestructura del país.
Durante la segunda mitad del 2016, el presidente y algunos integrantes de su gabinete presentaron el plan de infraestructura del gobierno y anunciaron el megaproyecto de UPM ante empresarios de tres continentes. En Shenzhen, en Santander o ante la elite empresarial de San Pablo, Vázquez ofreció oportunidades concretas de inversión.
El ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, ya había anunciado el interés de varias empresas por participar de las obras de infraestructura. Un hecho que hace respirar aliviado al gobierno, que ve el proyecto de UPM un paso más cerca.
Una empresa grande y con ganancias
NGE se presenta como una empresa de ingeniería civil involucrada en la construcción de proyectos de infraestructura a gran escala. Reporta ganancias por 1.5 billones de euros y emplea a unas 9.000 personas, según se informa en su página web. Tiene experiencia en proyectos de infraestructura urbana, hidráulicos, construcción de rutas y de vías ferroviarias, entre otros. Tiene presencia en más de 100 puntos en Francia.
