Distribución complicada

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Visitaron la ciudad dirigentes del Gremio de Funcionarios de Ancap invitados por representantes locales.

El dirigente local Jesús Isaza trabajador de la Planta de Distribución local decía que: «informando a la población sobre todo este barullo que se ha armado en torno a la empresa Ancap y que tanto está en la opinión pública y por eso los empleados de Ancap no estamos muy bien vistos, debido a mala información con un propósito muy claro de desprestigiar a la empresa. Nosotros defendemos la empresa pública, porque cumple un rol fundamental en la vida del país». La planta local trabaja en forma reducida y se ha relatado de una multiplicidad de tareas para intentar mantenerla operativa.

La dirigente Corina Samborino recordaba los motivos de la lucha: «con el nuevo modelo de distribución que tiene dos patas, por un lado los estacioneros que tienen un planteo del cual nosotros no estamos de acuerdo y por otro lado, se refiere a las plantas de distribución que puede ser como ejemplo la planta acá en Treinta y Tres.

El nuevo modelo establece una forma más justa de distribución de la ganancia. Hoy en día las estaciones se llevan una ganancia de 360 millones de dólares anuales y se reparte entre unas 300 estaciones de servicio y lo que Ancap propone con el nuevo modelo es establecer tres franjas, las que venden menos puedan tener un mayor margen de ganancia que las que venden mucho más combustible y de esta manera tiente al estacionero que tiene una Estación de Servicio, prácticamente que social, que vende poco combustible, como por ejemplo en Charqueada, que no están cerca de las ciudades grandes, permita ser rentable el negocio y tentador a su vez. Este nuevo modelo tiene algo que no estamos de acuerdo y tiende a liberar la comercialización del combustible» afirmaba.

La dirigente también recordó que Ancap perdió el monopolio en la distribución como estatal y pública: «hay tres empresas, Axion, Petrobras y Ducsa que es la empresa de Ancap, pero funciona en régimen privado y lo que se establece es liberar la comercialización. Hoy en día Ancap subsidia los fletes, lo que nos garantiza que tanto la estación más cercana, como la más lejana, nos llegue a todos el mismo precio de combustible y que se garantice la entrega del mismo. Al liberar los fletes, capaz que al fletero no le sirve llevar un litro de nafta a una estación lejana» finalizaba la dirigente.

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