Hoy se cumplen exactamente dos semanas de que Yanina Milagros Cuello Baladan, de 16 años, se encuentra desaparecida, luego de haber sido vista por última vez a las 23:30 horas, aproximadamente, del pasado sábado 3 de diciembre.
La adolescente que residía en la localidad de Pando, jugaba al fútbol en Rentistas y bailaba en una comparsa de candombe local llamada Bantú Kndombe. Vivía en la calle Anacahuita, entre Independencia y Camino Bertolotti. Desde allí fue que salió rumbo a la plaza central de la ciudad, que está a nueve cuadras de distancia.
Un mensaje de texto fue el momento clave para que la joven saliera rápidamente de su casa, con previo aviso a su padre: «Voy hasta la plaza y ya vengo». Pero el regreso nunca se cumplió.
Pasó la medianoche del sábado, y parecía ser una madrugada más, como tantas otras que Yanina había compartido junto a sus amigos.
Alfonso Cuello, el papá de la adolescente estaba en su casa junto a otros dos hijos.
«No era raro que saliera hasta la plaza, acá en Pando nos conoce todo el mundo, saben quiénes somos y nunca hubo ningún peligro, nunca pasó nada», indicó Alfonso a El País.
El padre está desconcertado al igual que toda su familia, y asegura que «en dos semanas se buscó en todos lados: en el campo, en Pando, en Empalme Olmos y en Suárez», todas zonas cercanas a la casa donde vive la familia Cuello.
Sin rastros.
El recorrido usual que Yanina hacía para llegar hasta la plaza principal (ver infografía) comenzaba por Camino Bertolotti, que luego se transforma en la calle Juan Zorrilla de San Martín y desemboca en la avenida General Artigas. Luego doblaba a la derecha y caminaba una cuadra por la avenida principal y allí llegaba directamente con el punto de encuentro de casi todos los jóvenes de la localidad.
El domingo 4 de diciembre, la familia de Yanina salió en su búsqueda, pero nadie sabía nada de ella. Hicieron el recorrido antes detallado en más de una ocasión, sin resultados positivos. Esa noche, llevaron a cabo la denuncia en la seccional policial de la ciudad.
Laura, una amiga de la joven según relató la familia de Yanina a El País, había estado con ella momentos antes de que desapareciera. «Fueron con la hermana mayor, Gabriela, a acompañar a Laura hasta la parada del ómnibus, después se vinieron para casa. Fue en ese momento que ella, estando acostada, recibió el mensaje y salió», relató Andrea, otra de las hermanas de la adolescente desaparecida.
La Policía de Pando llevó a cabo una investigación primaria, que consistió en interrogar al círculo más cercano de la joven. «Se le tomó declaraciones a los amigos y a los familiares, pero no hubo indicios preliminares que llamaran la atención», informó el comisario de Pando, Ruben Ramos.
El oficial aseguró que diferentes equipos de la Policía han ayudado en rastrillajes con perros, recorriendo campos cercanos a Pando, pero que ninguno arrojó buenos resultados.
«Ahora estamos a fojas cero», señaló Ramos.
El punto de inflexión en la investigación está centrado en el mensaje de texto que Yanina recibió a las 23:24 horas del sábado 3 de diciembre. Personal perteneciente a la Brigada de Homicidios de Canelones obtendrá en las próximas horas resultados sobre las pericias de la línea telefónica de la joven.
