Las calles del centro de la ciudad se vieron inundadas durante parte de la tarde con el tronar de bombos, canticos, palmas y despliegue de pancartas frente a la Jefatura del INAU en el departamento. Es que se desarrollaba una reunión bipartita, entre la Dirección departamental y representantes del Consejo Nacional y representantes del Gremio en lo nacional y en lo departamental.
Las reuniones y las esperas fueron largas en las negociaciones entre los actores nombrados y si bien hubo una «especie de tregua», se destacó que a pesar del conflicto, nadie dejó de cumplir su tarea, vale decir el cuidado de los menores y que se abren instancias de negociación futura, donde se intentará allanar los caminos en algunos desencuentros entre Dirección y personal que se sintió lesionado en sus derechos, al decir del gremio.
La Directora Dptal. Andrea Rodríguez relataba el origen del problema, marcando que: «hay un conflicto que se desata, que tiene una naturaleza profunda y distintos reclamos de trabajadores, que no estamos acostumbrados a tener acá en Treinta y Tres con este tipo de manifestaciones» fueron las primeras declaraciones luego de salir de la reunión.
Rodríguez hizo también referencia a los motivos de estas discrepancias, anotando que: «yo creo que tiene que ver, no en toda, pero en gran parte con una transformación profunda que se está promoviendo desde la institución y bien compleja con décadas de historias complejas en nuestro departamento, como ya sabemos que no siempre están vinculadas al equipo de trabajadores que diariamente cumplen su tarea hacia el cuidado de niños, niñas y adolescentes. Es un problema que de alguna manera involucra a toda una comunidad, porque el cuidado de los niños está en la mano de todos nosotros»
El delegado nacional del SUINAU, José Lorenzo López marcaba desde su óptica la causa del conflicto, marcando lo diferente de la realidad olimareña: «estamos en medio de un conflicto medianamente profunda.
Que no es una problemática por la que nos movilizamos habitualmente en los sindicatos. Normalmente los trabajadores peleamos por mejores salarios o mejores condiciones de trabajo y acá tenemos un problema que si bien no escapa a las realidades, fundamentalmente está centrado en lo que tiene que ver a un problema de relacionamiento a raíz de decisiones que se han tomado por parte de la Administración a nivel departamental que no han sido, digamos, de la mejor manera posible que no alcanzó a convencer al conjunto de los trabajadores que ese es el mejor camino a recorrer. Y cuando las cosas no se hacen por medio del convencimiento y se hacen por medio de la imposición, eso genera muchas rispideces que llevan a este tipo de conflicto»
Sobre la resolución del tema, López decía que si bien aún restaba la Asamblea con los trabajadores y la información de lo conversado en la bipartita, no se tenía mucha esperanza de una resolución rápida del conflicto y que debía haber mucho diálogo para acercar las partes.
