De acuerdo a la sentencia judicial que relata los testimonios de los procesados, la joven a la que hacía referencia había sido su novia y tenía 17 años. Según este testimonio, luego de que los tres tuvieron relaciones sexuales con la adolescente, el exnovio discutió con la joven y ella corrió hacia un barranco amenazando con tirarse si no se alejaba de ella.
La declaración de los procesados narraba que el hombre había forcejeado con ella y que así fue que terminó tirándola por el barranco.
Pericias posteriores determinaron que el exnovio no había estado presente, y que esas declaraciones habían sido acordadas entre los dos procesados para incriminar a un tercero.
Además, las pericias también determinaron que Analía agonizó por un buen rato y vivió atrocidades en sus últimos momentos. Murió por asfixia por inmersión, pero antes sufrió una grave fractura de cráneo por la caída desde 20 metros.
Así apareció horas después: boca arriba y con señales de haber sido violentamente agredida tanto física como sexualmente.
La magistrada consideró que los dos hombres que ahora están condenados dieron muerte a Analía para ocultar su violación y evitar que hablara.
R.A.S.V. y J.J.D.V. fueron condenados como autores penalmente responsables por un delito de homicidio muy especialmente agravado. Se les impuso una pena de 25 años y 24 años y 6 meses respectivamente.
FALTA INFORMACIÓN.
La familia sostiene que el sospechoso sigue libre, entre otras cosas, porque cuando realizaron los análisis de ADN aparecieron rastros que no pertenecen a ninguno de los dos que hoy están condenados.
La madre de la víctima también denuncia la falta de algunos resultados de análisis que se hicieron y no llegaron, o de careos que fueron ordenados, pero nunca se hicieron.
