El representante de la comunidad, José Luis Guma, salió al cruce de los hechos y reconoció que este joven estuvo en el grupo, que tuvo una vida normal durante su estadía y que no pueden responsabilizarse una vez que cualquier muchacho se aleja de la comunidad: «comentarle a la gente que este muchacho que fue procesado con prisión, perteneció a Beraca, hace más de un año que no está con nosotros. El chico, pasó por Beraca, estuvo poco más de año y medio, estuvo bastante bien, el decidió irse por cuenta propia, en Beraca a nadie se le obliga, cada uno puede decidir por su voluntad y desde que se fue hasta ahora, como que perdimos relación con nosotros. Sé que quedó viviendo acá en Treinta y Tres y estaba trabajando pero no tiene ninguna relación con nosotros.
Beraca es un hogar que alberga a chicos y chicas. En Treinta y Tres tenemos un hogar de varones, pero también hay de mujeres en otros departamentos. Beraca es un lugar que contiene a personas con una serie de dificultades con la sociedad como ser adiciones, violencia, diferentes problemáticas y funciona como un hogar de ayuda con internación.
Se autofinancia, cada hogar debe de tener un proyecto autosustentable para financiar el funcionamiento. Nosotros no recibimos ayuda económica de ningún lado, si bien acá en Treinta y Tres la Intendencia nos ayuda bastante dándonos este lugar para vivir. Por ejemplo con la venta de los alfajores, pero también con otros productos como los paños de piso».
