Cierra otra planta de SAMAN en Salto

La empresa Saman comunicó esta semana el cierre temporal de otra nueva planta arrocera durante la Reunión Sectorial del Arroz. En este caso la planta de procesado del cereal está ubicada en el departamento de Salto y emplea a unos 20 trabajadores que pasarán al seguro de paro.

Este cierre temporal se debe a que hubo una baja del área sembrada de arroz en la zona, por lo que el volumen de lo cosechado
no alcanza para cubrir la capacidad de todas las plantas, explicó a El Observador el presidente de la Asociación de Cultivadores
de Arroz, Alfredo Lago.

La diferencia, según Lago, con el cierre de la planta de Saman en Río Branco, que se concretó a fines de agosto, es que se envió a los trabajadores al seguro de desempleo, a la espera de que para la próxima zafra haya arroz para recibir y procesar, mientras que
en los casos anteriores el cierre fue definitivo.

En Cerro Largo, 33 trabajadores fueron enviados al seguro de paro y luego serán despedidos.

Lago apuntó a su vez que esta situación se va a seguir dando en el sector, con tres empresas más involucradas en el norte:
Casarone, Saman y Glencore. Según comentó las tres empresas están analizando como maximizar recursos para decidir cuál
toma la decisión de cerrar una nueva planta en los próximos días.

La principal problemática radica en que en los departamentos de Salto y Artigas existe capacidad industrial para procesar 35 mil hectáreas entre las cuatro plantas (dos pertenecen a Saman), pero la siembra proyectada en la zona es de 15 mil. Esto genera
capacidad ociosa en la industria mientras que los costos fijos se diluyen en menores volúmenes de exportación, lo que desembocará en que empresas vinculadas tanto a la industria como al sector productivo reduzcan sus plantillas de empleados.

El arroz ocupará en su próxima zafra –que comenzará en los próximos días– la menor supercie
de los últimos 25 años,
considerando que los productores avizoran esta vez una caída del 30% en la intención de siembra, el mayor ajuste desde que hay
registros.
En este sentido y pese a su ejemplar productividad (Uruguay se encuentra entre los líderes del mundo) y a que los precios
internacionales se mantienen en niveles estables, los altos costos para producir no dejan otro camino que el repliegue.

Según afirman desde la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA), el área arrocera –que viene en descenso desde 2010/2011–
se desplomará en la próxima campaña, cuando según estimó Lago se pase a un área de siembra de 135.000 hectáreas (ha) frente
a las 155.000 cultivadas en la zafra anterior.
Para encontrar un área tan baja hay que remontarse a la campaña de 1991/1992, cuando se implantaron en 127.000 hectáreas.
Luego el cultivo fue ganando espacio y se llegó a un récord de superficie cultivada en 1998/1999 con 205.000 ha, con otros registros elevados en 2003/2004 y en 2010/2011, en ambos casos de 195.000 hectáreas.

Observador