¿Sindicalizar a los «desgraciados del software»?

Los consejos de salarios en el contexto de la nueva revolución industrial fue el tema central de la conferencia que reunió este jueves al director nacional de Trabajo, Jorge Mesa, al presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira y al asesor de la Cámara de Industrias, Gonzalo Irazábal en el Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay.

Los participantes coincidieron en que los cambios que se están procesando en el mercado laboral tienen que empezar a tratarse en los ámbitos de negociación colectiva durante los meses donde no se discute por salario.

Durante su presentación, Irazábal destacó que aunque el ajuste de los salarios «no es un tema menor», en las negociaciones se debería dar prioridad al empleo y pensar cómo incorporar formación, capacitación, educación y reconversión para los trabajadores.

«Hay empleo que van a desaparecer y se van a crear otros, pero no a la vez porque todo llega más tarde. Y hay que estar preparado para esos nuevos puestos de trabajo». (…) Se dice que la formación y capacitación es costosa, pero si eso es caro, no saben lo caro que es la ignorancia», apuntó.

A su turno, Pereira subrayó que si el país quiere pasar del crecimiento al desarrollo, tanto empresarios como sindicatos tienen que «salir» de la zona de confort y «eso es dolor».

De otra manera se continuará con la dinámica tradicional de los consejos de salarios sin aportar nada a las generaciones venideras, afirmó.

«Fui a negociar cinco convenios de productividad y todos terminaron de la misma manera. El empresario proponiendo un mes más de sueldo sin ninguna contrapartida de productividad, con tal de no discutir formación de mano de obra, capacitación, categorización y humanizar el lugar de trabajo. Nadie produce más en un lugar que se siente mal», dijo Pereira a modo de ejemplo.

También se refirió a la necesidad de reforzar el papel de los sindicatos en actividades como el trabajo rural y la industria del software. En este último caso, dijo que no por que tengan salarios bajos, sino porque hay condiciones de trabajo «no aconsejables».

«Me levanto en mi casa y empiezo a trabajar. Duermo una siesta, me levanto y sigo trabajando en mi casa. Almuerzo en mi casa, como en mi casa y ¿cuál es tu vida papá? ¿Con qué compañero te vas a vincular? ¿Cuál es tu vida social? Capaz que gana $ 100 mil, pero es un desgraciado en términos de construcción de vida. ¿Queremos eso para nuestros compatriotas? Yo no», dijo Pereira.

Por otro lado, el dirigente del PIT-CNT reconoció las posibilidades que brinda el avance de la tecnología en diversos campos, pero advirtió que buena parte de la sociedad no escribe ni lee.

«Uno puede pensar en África, en India. No, es acá en Uruguay. Esa gente superó la línea de la pobreza porque gana más de tanto, pero con un trabajo de baja calidad, que son los que van a desaparecer más rápido», alertó el presidente de la central sindical.

En tanto, Mesa hizo énfasis en la necesidad de redefinir las categorías de evaluación de tareas con que se fijan los mínimos salariales en los ámbitos de negociación. Muchas datan de 1960 y hoy todavía se utilizan.

«Sobre esa estructura se fijan los mínimos salariales que resuelven diferencias y responsabilidades entre puestos de trabajo, y pagamos a unos X y a otros Y en función de esas descripciones de los 60. El agua pasó por arriba del puente muchas veces. Y esas diferencias no son parte real de la organización del trabajo, ni de la distribución de responsabilidades, ni de los conocimientos requeridos», reconoció el jerarca.

Según Mesa, hasta ahora no se ha avanzado en ese tipo de temas porque a lo largo de 10 años la prioridad siempre ha sido el ajuste del salario.

También dijo que hay que revisar la estructura de sectores y ramas de negociación. ¿Qué tienen que ver los peajes con el Sunca? se preguntó Mesa en referencia a que esa actividad negocia en el grupo de la construcción.

Observador